Boca Juniors estuvo muy cerca de dar el batacazo ante el Benfica, pero el partido -vistoso futbolísticamente hablando y ríspido por su intensidad- dejó al equipo argentino con un sabor amargo por el empate que lograron los portugueses en los últimos minutos de juego. Sin embargo, Boca demostró que no fue al Mundial de Clubes a pasear y que puede ser un gran protagonista.