Tras el fallo de la Cámara Federal de Casación Penal que ratificó la prisión perpetua al ex gendarme Eduardo Abelardo Britos, el organismo provincial calificó la decisión como un acto de justicia y un avance en el reconocimiento del terrorismo de Estado ejercido en La Rioja.
La Secretaría de Derechos Humanos de La Rioja calificó como un acto de justicia la confirmación de la condena al ex gendarme Eduardo Abelardo Britos por el asesinato de Wenceslao Pedernera, crimen cometido durante la última dictadura cívico-militar. En ese marco, el organismo destacó que el fallo también reconoce la persecución sistemática contra la pastoral impulsada por el obispo Enrique Angelelli.
El pasado 16 de diciembre de 2025, la Cámara Federal de Casación Penal ratificó la condena a prisión perpetua de Britos por delitos de lesa humanidad cometidos en La Rioja, entre ellos el asesinato del campesino Wenceslao Pedernera ocurrido en 1976. La resolución fue adoptada con los votos afirmativos de los jueces Alejandro Slokar y Ángela Ledesma, mientras que Guillermo Yacobucci votó en disidencia.
Ante esta decisión judicial, el secretario de Derechos Humanos, Delfor Brizuela, resaltó la argumentación del juez Slokar, quien calificó el crimen como parte de un “genocidio” y lo vinculó con la persecución sistemática contra la pastoral de la Iglesia riojana, encabezada por el obispo Angelelli, también asesinado por la dictadura.
Asimismo, se destacó el reconocimiento al trabajo de la Comisión Provincial de Derechos Humanos de La Rioja, que documentó el plan represivo desplegado en la provincia, dirigido especialmente contra la pastoral comprometida con los sectores populares y su lucha contra la injusticia social.
Desde la Secretaría de Derechos Humanos se celebró la decisión del máximo tribunal penal como un triunfo de la verdad y la justicia, al tiempo que se reivindicó el legado del beato Wenceslao Pedernera, quien durante su agonía pidió a su familia “no odiar”.
En ese sentido, Brizuela expresó: “Frente a la crueldad y el individualismo egoísta de estos tiempos, Wenceslao es bandera de lucha y de amor, una referencia que resiste y construye comunidad”.
Wenceslao Pedernera
Wenceslao Pedernera, trabajador rural e integrante del Movimiento Rural Cristiano, fue asesinado a balazos por un grupo de tareas el 25 de julio de 1976, en la puerta de su casa y frente a su esposa, Marta Cornejo, y sus hijas María Rosa, Susana y Estela, que entonces eran pequeñas. En 2019 fue beatificado por el papa Francisco, junto a Enrique Angelelli y los sacerdotes Carlos de Dios Murias y Gabriel Longueville.
