El salteño reveló el esfuerzo que hizo para poder llegar al casting del reality de cocina que se emite por Telefe
La tercera temporada de Masterchef ha logrado buena aceptación de los televidentes y este formato ya se convirtió en un clásico de la pantalla de Telefe. En los primeros días del ciclo conducido por Wanda Nara, se destacó entre los participantes Antonio, un joven salteño estudiante de enfermería que conquistó con sus delicias a los jurados Donato De Santis, Germán Martitegui y Damián Betular.
“Yo vengo de Salta, un pueblito, una localidad que se llama La Merced”, dijo el concursante en una charla con Georgina Barbarossa. Luego, reveló que desde hace años soñaba con estar en el reality: “En 2015 lo vi y soñé que quería estar acá. Tenía 13 o 12 años, estaba terminando la primaria. Vi esa final y dije ‘yo quiero estar ahí, quiero tener mi delantal con la ‘M’ bordada y que tenga mi nombre’. Y bueno, como son las vueltas de la vida, ahora estoy acá”, agregó, y reveló cómo se inclinó por esta aventura gastronómica.
“Yo estaba estudiando enfermería, me encanta la profesión. Pero, cuando se abrió la convocatoria, dije: ‘Quiero esto, me gustaría dedicarme a esto’. Siento que cocinar es algo que me apasiona, y me encantaría trabajar de algo que me apasiona, me encantaría estar relacionado con esto”, afirmó muy emocionado en el ciclo A la Barbarossa.
Además, el participante contó cómo nació su pasión por la cocina: “Desde muy chiquito vivía en la casa de mis abuelos. Siempre había comida cacera, comida hecha al horno de barro, comida cocinada con leña. Locros, empanadas, humitas, tamales, pastas caceras, toda comida tradicional del norte”, enumeró, en relación a los platos típicos de su provincia.
Cuando Georgina le consultó cómo hizo para llegar al casting, él respondió: “Recibí ayuda de mucha gente para llegar hasta acá. Una familia acá me acogió durante un tiempo, en los primeros días del casting. Muy agradecido, porque gracias a ellos hoy estoy acá, que me dieron el primer hospedaje”. Luego, señaló que nunca se había ido tan lejos de su pueblo natal, lo que hizo su historia aún más emotiva.
Por otra parte, este domingo pasado se llevó a cabo la primera gala de eliminación enMasterchefy los ocho participantes que tuvieron que competir para seguir en carrera fueron Estefanía, Agustín, Juan Ignacio, Delfina, Emilio, Micaela, Juan Francisco y Daniela.
“Hemos decidido presentarles un desafío particular. Algo que todos los argentinos amamos, y me incluyo, aparte del asado y es perfecto para un día domingo: la pasta”, anunció Donato. Y Martitegui agregó que tendrían solo 3 minutos para ir al mercado y 60 para cocinar “el mejor plato de pasta rellena de su vida”, incluyendo la masa, el relleno y la salsa. “Alguien que se jacte de ser un buen cocinero tiene que saber hacer una pasta rellena”, concluyó luego Betular. Y todos pusieron manos a la obra.
Emilio elaboró unos sorrentinos Quiquita con salsa pomodoro, en honor a su abuela que los hacía utilizando seso como ingrediente. Pero su plato no convenció a los jurados y quedó fuera del certamen. “A la pasta le falta cocción y tiene poca cantidad de relleno”, comentó Betular. Por último, el participante se despidió de todos: “A mis compañeros quiero desearles suerte y que puedan aprender mucho. Yo voy a seguir cocinando porque es lo que me gusta, es mi pasión de esta última etapa de mi vida. Yo disfruto mucho, porque las alegrías de comer no me las quita nadie”.